Los detectives privados quieren ser iguales en toda la UE

Investigadores de toda Europa se reúnen para pedir una participación más activa en la indagación de los delitos



El sector de los detectives privados en España está en auge desde hace unos años. Lejos ya de aquel típico papel en el que se dedicaban principalmente a clientes privados para temas personales, como seguimiento de infidelidades conyugales, hoy en día el 80 por ciento de las investigaciones de los cerca de 2.000 detectives privados con licencia en España están relacionados con el mundo judicial. Un ámbito en el que "durante años hemos caminado de manera separada", según indica Agustín Ruiz, secretario de la Asociación Profesional de Detectives Privados de España (APDPE).

Dejados atrás estos años de separación y con la entrada en vigor de la Ley de Seguridad Privada, que supuso un punto de inflexión en su actividad al exigir una titulación y regular el ejercicio de la profesión, su trabajo ha adquirido más valor a la hora de aportar pruebas ante los tribunales en casos como los de fraude interno o fugas de información en una empresa, o ante falsas bajas laborales.

Pero su labor no está exenta de algunos retos de cara al futuro, que ahora están intentando solucionar en el Congreso de la Federación Internacional de Asociaciones de Detectives (IKD) y en la VI Asamblea de la Asociación Profesional de Detectives Privados de España, que se celebra estos días en Zaragoza.

En el encuentro intentan poner soluciones a la diferencia de cualificación entre los profesionales de los diferentes países europeos para que se "armonicen los criterios de formación para la obtención de licencias", indica Agustín Ruiz.

Frente a la UE
En España se exigen más requisitos, como haber cursado en la universidad los tres años de Investigación Privada, entre otras exigencias, para que el Ministerio del Interior conceda la licencia de detective privado, frente a la cualificación en otros países de la Unión Europea, como puede ser el caso de Francia, en el que apenas hay requisitos.

Esta diferencia conlleva algunos problemas con la libre circulación de trabajadores porque puede suponer un choque para quien venga a trabajar aquí, además de favorecer otras situaciones. Por ejemplo, "un español que no quiera estudiar podría ir a Francia a sacarse la licencia y venir luego a trabajar a España", indica Agustín Ruiz. Por ello "es tan importante coordinarnos entre los países para que en la Unión Europea se pongan unos estándares", pero que estén por encima de los europeos y sean similares a los existentes en España, país que hace 15 días ha tenido que modificar la Ley de Seguridad Privada mediante un Real Decreto por imperativo de la Unión Europea.

Además de luchar por esta homologación, estos profesionales también están trabajando para que se instaure en España la figura del detective privado de oficio, propuesta que ya han realizado al Estado para que personas que no tienen recursos económicos puedan solicitar sus servicios.

Y es que "se trabaja mucho en desmontar falsas denuncias de malos tratos, incumplimiento de órdenes de alejamiento, porque la policía no tiene suficientes efectivos, y hay un problema de indefensión de las personas que no tienen medios económicos para costearlo". En esta línea de poder agilizar investigaciones ante la falta de efectivos policiales se enmarca también su petición de "poder trabajar para esclarecer delitos perseguibles de oficio, como asesinatos, robos o violaciones, siempre que el cliente quiera y haya una autorización judicial" para poder esclarecer la investigación más rápidamente.